El neurólogo Gomez-Pinilla (2010), afirma que el ejercicio físico está inscrito en nuestros genes y que nuestro cerebro se ha desarrollado gracias a ello. Es sabiendas que con la práctica de ejercicio se segregan cierto tipo de endorfinas en nuestro cerebro que nos producen placer e que incluso nos ayudan a regular nuestro estado de ánimo.
Además de estas características adjuntas a la práctica deportiva existe otros beneficios según la finalidad del practicante ya sea consciente o no consciente de ello.
Si preguntásemos a cualquier persona practicante de deporte el motivo de su entrenamiento es probable que nos señale los beneficios que conlleva a su salud (reduce enfermedades, evita la depresión, mejor funcionamiento del organismo, evita la obesidad…). Aunque en los últimos años ha crecido el número de practicantes que lo hace con fines estéticos e incluso ególatras.
La dimensión social es otra faceta interesante ya que las personas que practican deporte pueden interaccionar entre ellas dentro de un marco propio pudiendo establecer y compartir valores, vivencias, emociones y un sinfín de beneficios. Su expresión máxima social funciona como integrador social donde las personas con riesgo de exclusión son insertadas gracias al deporte.
Mucha otra gente utiliza el deporte como método de canalización de su energía, estrés o emociones. Aunque esta claro que en estos casos no solamente sirve la práctica del deporte sino que hay que tomar consciencia de la situación personal que le genera esos estados e intentar trabajarlos.
Otras personas, a causa de experiencias negativas en el pasado, buscan reconocimiento, sentirse válidos, aceptados, buscamos vigor….
Lo que es fascinante es la capacidad de transformación que tiene el deporte en la conducta humana, ya que sea cual fuese el motivo que le impulso a hacer ejercicio se puede convertir en un hábito y en un estilo de vida y esperemos que saludable!.
Un hábito que nos conecta con nuestros genes, con nuestra naturaleza y con nuestro espíritu de supervivencia (igual que un guepardo corre tras un impala o un gorila lucha por su territorio).
José C. Núñez
hominoideos 
Muy de acuerdo con el artículo. Además lo estoy experimentando actualmente en primera persona! Me gusta que de forma resumida se destacan tanto los motivos sanos y constructivos como los provocados por ciertas carencias o incapacidad de gestión emocional por los que se comienza a practicar el deporte. De todos modos si se practica sana-mente siempre acaba beneficiándonos!! Gracias por el articulo.
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